El vicepresidente de Economía venezolano, Miguel Pérez Abad, auguró que el país petrolero, que cerró el 2015 con una inflación de 180 por ciento -una de las más altas del mundo-, podría experimentar una "deflación" para 2016 como resultado del nuevo sistema cambiario.
"Vamos a tener probablemente a finales de año una deflación de los precios", dijo Pérez Abad en una entrevista al canal internacional Telesur, con base en Caracas, para referirse a las repercusiones que tendrá la puesta en marcha del sistema de flotación del mercado cambiario bajo el control estatal.
El también ministro de Industrias, que encabeza el equipo económico del Gobierno, confía en que "con el transcurrir del tiempo" se experimente una "ralentización de los indicadores de inflación para el país y el mejoramiento de forma visible de la calidad de vida de los venezolanos que van a tener mejor calidad de compra y accesos a los bienes".
El Gobierno de Nicolás Maduro anunció la implementación de un nuevo sistema cambiario dual, uno con una tasa fija establecida inicialmente a 10 bolívares por dólar destinada al sector de alimentos y farmacéutico, considerados como prioritarios.
Una segunda tasa flotante para los sectores considerados como no prioritarios, que se cotiza actualmente en 215 bolívares por dólar, un mercado en el que, de acuerdo a las expectativas de Pérez Abad, se espera que "se trancen alrededor de 7.000 millones de dólares este año".
El sistema "está diseñado para captar y administrar divisas, así es que lo que el Estado no pueda cubrir, lo harán los privados, los inversionistas internacionales e inclusive los tenedores de divisas", indicó.
El funcionario aseguró que en la medida de que este sistema flotante se ponga en marcha, podrá ir desapareciendo el mercado ilegal de divisas que cotiza a la moneda americana muy por encima del cambio oficial.
"Una vez que el sistema de flotación empiece a impactar el mercado, los actores económicos empiecen a recurrir al nuevo sistema de flotación y logren respuestas, en ese mismo momento el paralelo desaparecerá como un elemento que distorsiona la economía nacional", aseguro el vicepresidente económico.
Refiriéndose también al plan de recuperación económica diseñado por el Ejecutivo para atender la crisis que atraviesa el país, principalmente afectado por la escasez y el alto costo de la vida, aseguró que se están logrando "unos niveles de acupuntura financiera que nos permite que cada sector tenga las divisas necesarias".
"El país tiene garantizado los insumos (componente) y materias primas para los productos esenciales para la vida y el resto de la economía nacional será alimentada de manera progresiva por el sistema complementario de divisas que dará respuesta a mas del 70 % de las necesidades", dijo.
Asimismo "vamos a tener un incremento notable de las exportaciones no tradicionales que también nos va a permitir compensar, ayudar a traer insumos por la vía del cambio de divisas", añadió.
El sistema ha sido puesto en marcha en un momento en el que el país enfrenta una dura crisis económica exacerbada principalmente por la caída de los precios del crudo que ha mermado hasta en un 70 % los ingresos de la nación petrolera.
La deflación, en economía, es la bajada generalizada y prolongada (como mínimo, dos semestres según el FMI) del nivel de precios de bienes y servicios.
Suele responder a una caída en la demanda y puede tener consecuencias más negativas que la inflación