El gran maestro de ajedrez más viejo del mundo, contra el más joven

El gran maestro de ajedrez más viejo del mundo, Yuri Averbakh , de 95 años, jugó contra el más pequeño, Misha Osipov, de cuatro. Ganó el niño,quien rechazó una oferta de tablas del maestro. Ya antes había jugado contra Anatoly Karpov, donde acabó llorando al perder la partida

55555

¿Cuál es la mejor edad para jugar al ajedrez? No está del todo claro. Es una cifra que ha ido bajando con el tiempo, aunque a la vez tenemos ejemplos de grandes maestros que rondan el medio siglo y siguen en la élite, como Anand y Gelfand, o incluso Kasparov, que con 54 sigue siendo un hueso duro de roer, como demostró hace unas semanas. El pasado 29 de agosto vimos un caso extremo de hasta dónde se puede estirar esta cuerda. Un festival celebrado en Rusia con fines benéficos para ayudar a niños huérfanos dio lugar a una batalla que no podía ser más desigual. El gran maestro más viejo del mundo, Yuri Averbaj, de 95 años, jugó contra el pequeño Misha Osipov, de cuatro. El pequeño se hizo famoso hace unos meses, cuando solo tenía tres, después de romper a llorar en televisión en otra partida de exhibición contra el excampeón mundial Anatoli Karpov.

66

La fiesta se celebró en Moscú, organizada por Change One Life, con la participación de ocho jóvenes talentos y del último subcampeón del mundo, Sergey Karjakin. Entre el público destacaba el excampeón Boris Spassky. En el duelo Osipov-Averbaj había más de 90 años de diferencia. ¿Quién tenía ventaja? Yuri Lvovich tiene problemas de visión, además de un carro de años (nació en 1922), pero el que fuera campeón de Moscú en 1949 y campeón de la URSS en 1954 tiene, qué duda cabe, más experiencia que nadie en el mundo el ajedrez.

Pese a todo, Averbaj, autor de excelentes libros de ajedrez, conserva una buena cabeza, pero no pudo con la frescura del sorprendente Osipov. El chico tiene toda la pinta de convertirse en uno de los grandes maestros más precoces de la historia. El chico apunta maneras y además tiene un rostro de lo más expresivo y fotogénico. Misha no perdonó. Llegó a rechazar una oferta de tablas: «Después de todo, yo estaba mejor. ¿Por qué tendría que conformarme con un empate?», se justificó. Casi con toda seguridad, Mijail Osipov es el jugador más joven en derrotar a un gran maestro, aunque dada la edad del rival, el mérito es matizable.

tt

Antes de «estar mejor», parece que Averbaj se había dejado una torre en una refriega táctica, propia de la velocidad del juego (10 minutos más cinco segundos de incremento), que sin duda beneficiaba al más joven. La filosofía de Osipov sobre el tablero es sencilla, según declaraciones recogidas por la Federación Rusa de Ajedrez: basta con hacer las jugadas más fuertes y luego todo irá bien.

Después de esta partida, se celebró otra por parejas. Karjakin y Osipov contra Averbaj y Zhukov. Cuentan que fue fácil para los primeros, en cuanto el niño entendió las normas.

Merece la pena ver el vídeo de la famosa partida televisada entre Karpov y Osipov, que acabó llorando su derrota y llamando a su mamá. Es difícil no reír o soltar alguna lágrima, puede que a la vez. Tampoco han faltado voces críticas contra un espectáculo así, algo obsceno para algunos dada la corta edad del protagonista. Después de la partida, resolvió ante el público varios problemas de ajedrez con una facilidad pasmosa. Quizá los conocía de memoria.

En la foto que encabeza esta entrada, por cierto, no hace falta saber ruso para ver que los rótulos con los nombres y edades de los jugadores están cambiados.