Bachaqueros, esas que fingen ser sufridas madres y abnegados padres en una cola, que cargan a sus hijos para inspirar compasion y lastima. Que corren ante el rumor de harina, azucar o café. Sus mensajes de texto son coordenadas de supermercados. Jorobadas por el peso de las bolsas, cambiaron el bolivar por el peso, asi son mis vecinos.
Venezuela sale de la crisis con trabajo, pero el espiritu de muchos lo inspira la trampa y el dinero facil, los taxistas llevando gasolina a Colombia; los pañales, el jabon, la leche son lo mas codiciado por los nuevos exportadores. Amas de casa convertidas en contrabandistas, la pobreza, la ausencia de principios y dignidad les cambio la vida, padres flojos, facilistas y perezosos adormilados en una cola de supermercado.