Por segundo año consecutivo, el gobierno ordenó a las empresas Movistar y Digitel revertir el aumento en las tarifas de telefonía e Internet que debía hacerse efectivo a partir de este mes.
El ministro de Comunicación e información, Ernesto Villegas, aseguró a través de su cuenta en Twitter que el director de Conatel le notificaría la decisión a las operadoras. "Presidente @NicolasMaduro ordenó revertir aumento inconsulto de tarifas por parte de Movistar y Digitel #ConstituyenteYJusticia".
A pesar de que el ministro dijo que el incremento fue inconsulto, fuentes cercanas a las operadoras indicaron que la decisión se había discutido con los organismos del gobierno. Además, las autoridades sabían el porcentaje del alza.
Desde la segunda quincena de julio, tanto Movistar como Digitel publicaron en prensa las nuevas tarifas, que comenzarían en agosto. En algunos casos los planes subieron más de 700%. Aunque se conoció que el aumento se pagaría de manera escalonada.
Ayer los usuarios en redes sociales manifestaron su malestar por el alza, pues sostenían que los porcentajes eran muy altos. Sin embargo, una fuente de la industria recordó que las compañías tenían las tarifas rezagadas desde hace cinco años.
"Este es un golpe duro, las operadoras no han podido subir las tarifas desde hace dos años y los montos vigentes están muy rezagados frente a la inflación. Era urgente hacer esos ajustes para poder garantizar el mantenimiento mínimo de las redes. En los últimos meses ha aumentado la demanda de datos. Si no se hace algo, puede haber un colapso", indicó.
Repunte de vandalismo
Otra de las fuentes consultadas precisó que además del mantenimiento regular de las redes, los gastos de las operadoras han aumentado por los hurtos de los que han sido víctimas.
Solo en el caso de Movistar, este año se han registrado 545 eventos vandálicos, 58% más que en el mismo período de 2016, cuando se produjeron 354.
"En las condiciones actuales es muy difícil que las empresas sigan operando. Tienen que buscar la manera de reducir sus costos, para poder resistir. Sabemos que a los usuarios les pega, porque nuestro poder adquisitivo ha caído mucho, pero es imposible tener un buen servicio sino se paga por él. Aun con el aumento que estaba previsto, Venezuela seguía teniendo las tarifas de telefonía más baratas del mundo".
